jueves, 1 de julio de 2010

Entrevista con Sergio Romero:guardameta de Argentina




Hace cuatro años, la imagen de Jens Lehmann leyendo un papel con la indicación sobre dónde debía arrojarse en los penales contra Argentina recorrió el mundo. El alemán, que había hecho su tarea en la previa, detuvo finalmente los disparos de Roberto Ayala y Esteban Cambiasso para darle el paso a los suyos a la semifinal de la Copa Mundial de la FIFA. En Argentina, a miles de kilómetros de Berlín, Sergio Romero era uno de los chicos que aún iba a la escuela. Recuerda haber visto las alternativas del encuentro por televisión, sin imaginar que en la próxima Copa del Mundo tendría ante sí la posibilidad de vengarse. A horas de saltar al campo de juego en Ciudad del Cabo para buscar un lugar en semifinales, el misionero dialogó con FIFA acerca de su presente, el inminente partido con Alemania y las posibilidades que tiene de alcanzar su primer título con el seleccionado mayor.








Sergio, ¿qué análisis hace de la actuación del equipo contra México en octavos? Creo que hicimos un gran partido. Sacamos una buena ventaja en el primer tiempo y después lo reafirmamos con el golazo de Carlitos. Lo más importante es que, incluso cuando no tuvimos la pelota, no nos desesperamos y logramos mantenernos compactos. En líneas generales estamos haciendo un muy buen trabajo. Lo hemos visto rechazar muchos balones hacia los costados sin intentar retener.




¿Es algo deliberado?




Sin dudas, no me complico demasiado. Mi trabajo es transmitirle seguridad a mis compañeros y para eso es importante hacer todo lo más sencillo posible. El balón por momentos toma direcciones inesperadas, como en el remate de (Carlos) Salcido que pegó en el travesaño. Parecía que se iba y bajó de golpe, por suerte pude poner los dedos y no entró.
¿Le sorprendió el resultado de Alemania ante Inglaterra?




La verdad que sí. Todos pensábamos que iba a ser un partido distinto, con un resultado de uno o dos goles de diferencia para el ganador. Pero Alemania demostró su categoría y, después de esos 5 minutos en los que Inglaterra se acercó y presionó, resolvió todo con tranquilidad. Enfrentaremos a un equipo muy poderoso, pero tenemos que mentalizarnos en seguir haciendo el mismo buen trabajo que hicimos hasta aquí.
¿Cómo evalúa las opciones de Argentina en el torneo?




Si seguimos jugando como hasta ahora, tenemos muchas posibilidades de avanzar. En cuanto a lo personal, sé que el puesto de arquero es decisivo y sólo espero mantener el mismo nivel que hasta ahora. Es importante darle confianza al resto del equipo para que pueda desenvolverse con naturalidad y marcar la diferencia en ataque.
Hace cuatro años, Lehmann saltó a la fama por su papel en los penales contra Argentina.




¿Ha estado estudiando a los posibles ejecutantes para el próximo sábado?




Sí, vimos un montón de videos y analizamos ese aspecto. Lo que pasó en 2006 fue algo increíble. Nadie esperaba que, además de ver los videos, alguien fuera a anotarlo en un papel para recordarlo. De todos modos, creo que los penales son más asunto de intuición que otra cosa: uno puede mirar 800 penales, pero si te tiras donde indicaba el video y el balón va al otro lado, no sirve de nada. Lo importante es lo que siente el portero en el momento de elegir un poste y arriesgar todo por eso.




La gente en Argentina está muy ilusionada con el equipo. ¿Le gustaría enviar algún mensaje?




Quisiera aprovechar para enviar mi amor a mi mujer y a mi hija, que están siguiendo el Mundial desde Buenos Aires. No es fácil estar tanto tiempo lejos de casa, y sé que mi esposa guarda todas las notas que hago para mostrárselas a mi hija el día que crezca. En cuanto a la gente, que se queden tranquilos: estamos trabajando duro para conseguir lo que Argentina no ha conseguido hace tiempo. Queremos llevarles la alegría que se merecen.




Agencias La Prensa

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